TEGUCIGALPA.- Los temas principales de los políticos en las recientes elecciones primarias fueron la educación, salud, seguridad y combate a la corrupción.
Corea del Sur, hace 60 años, entendió que para tener una buena educación, salud y seguridad debían fortalecer su economía agraria e industrial. Eso los hace actualmente uno de los países líderes en el mundo.
En Honduras se debe entender que si la economía permite escoger entre una buena educación y una buena salud, se tiene que preferir la educación, ya que con educación viene la salud.
Según analistas, el gran cáncer de la economía hondureña radica en el magisterio y la Corte Suprema, ya que ni hacen ni dejan hacer.
Digno ejemplo es la mala preparación de hijos de la mayoría de los hondureños por parte del magisterio político-económico y las malas decisiones de la Corte Suprema al querer mantener a Honduras como el país más violento y corrupto del continente americano.
Esa situación jamás permitirá atraer nueva inversión extranjera, y aún peor los hondureños con capacidad de abrir negocios están invirtiendo en otros países, ya que como dicen muchos eruditos: “Dinero que no crece, perece”.
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